En la eterna búsqueda de pertenecer, buscamos en la imagen física un aliento de cercanía. El otro se convierte en nuestro espejo, indagando en similitudes, con el fin de encontrar comunidad y alentar la convivencia; lo que más a menudo de lo necesario recae en comparaciones vacías y la distorsión de la identidad propia. Esta serie busca hacer eco de las necesidades intrínsecas y extrínsecas que nos fuerzan a malear nuestro cuerpo para crear reflejos (im)perfectos, hasta llevarlo a puntos irreconocibles donde la realidad queda en un segundo plano.